2020

Fotografía: Alay Fuentes, (Pinar del Río, Cuba).

Exhausta

de tanto pánico

de la asfixiante mascarilla.

Insomnio

rabia

nervios

espera

impotencia

soledad.

Meses muertos

vuelos que anhelo.

El tiempo se detuvo.

Cada uno tras su coraza

o desgracia

procurando ser mejores.

Inerte mano

Lo sé
he alzado muchas veces un martillo
sobre tu cordura
te he dejado al pie del sepulcro.

Mientras aparto las piedras
acumuladas a mi paso
una a una casi me vencen
y yo sigo sin tu mano
inerte mano que no alcanza.

La soledad me azota

como un látigo
aunque te tenga
estés aquí

me abraces.

Si decidiera irme nunca será tarde
cualquier puerta entreabierta
aguarda un sólo golpe.

Todo lo que me falta

La familia que nunca me dio la espalda

un abrazo sincero

mi ciudad desteñida

casi en ruinas,

esas playas de arena tan fina

como ninguna,

mi gata Lola.

El barrio y todos sus rincones

la gente que sé que me quiere

ciertos paisajes

sus olores

aquellos libros viejos 

que nadie más leyó.

La casa siempre verde

me espera impaciente.

Ese montón de fotos

cartas amarillas

que dejé en un cajón.

Sentirme feliz con pequeños gestos

el sosiego, la tranquilidad,

los buenos programas de radio

el muro del Malecón.

Una botella de Ron en tu compañía

despertar con una sonrisa.

Mi abuela y todo su cariño.

Ari

Desde el puente del arcoiris
aguarda
ronronea
se afila las uñas.

Añora mi regazo
acurrucarse entre dos,
las cálidas manos
cada rincón de la casa
que hizo suya.

Ciertos animales
valen más que mil personas
llenan un gran vacío
y uno no se conforma
cuando parten
sin previa despedida.

Nomeolvides

Quisiera tener fe
la certeza de que estoicamente
mueves los hilos
juegas con mi suerte
mandas mil señales.

Eras único en tu especie,
era yo la meta
el desafío
todos los sueños acumulados
impulso para superar el miedo
la incertidumbre,
mas no pude salvarte.

Quisiera tener fe
y la más absoluta convicción
de que muy pronto
volveré a tu abrazo.

Freddie

Con un nudo en la garganta
escucho 'Mother Love',
lágrimas escapan.

Hasta las piedras se emocionan

con tu voz.
Cuánto valor te acompañó
cuánta hombría.

La perfección
el desafío
todo lo divino que hubo en ti
no se repetirá.

¡Qué injusta es la vida
a veces!